Los pestillos electromagnéticos se utilizan en industrias donde es necesario controlar el cierre o apertura de un sistema eléctrico desde una ubicación remota. Esto se hace a través de relés electromagnéticos o bobinas magnéticas que utilizan energía estática para generar corriente alterna. Es muy conveniente tener estos sistemas porque no requieren mano de obra, no hay necesidad de líneas eléctricas y son muy seguros. Se puede decir con seguridad que estos sistemas son de gran valor para la industria.
La función básica de este sistema es encender y apagar automáticamente dependiendo del estado del relé. La principal diferencia es que en el caso de los relés de enclavamiento magnético, el estado de conmutación se controla de forma automática o manual y, por lo general, solo el estado abierto o parcialmente abierto depende de la función de los imanes temporales. Esto significa que si lo está instalando en un sistema que requiere un circuito completo, es mejor considerar el uso de un relé de alta calidad con alta clasificación para evitar cortocircuitos.
En el caso de que el estado de conmutación se controle manualmente mediante un interruptor, los requisitos de suministro de energía son mínimos porque el circuito no requiere ninguna fuerza magnética activa. El estado abierto simplemente significa que la fuerza magnética está en su estado permanente, es decir, no está siendo empujada hacia abajo ni hacia arriba. Si se requiere el circuito abierto por algún motivo, como la conexión a una fuente de alimentación, generalmente se requiere que el relé permanezca en estado abierto para permitir que fluya la energía.
En el caso de que el sistema requiera un interruptor automático para cerrar, normalmente los relés de enganche magnético tienen un interruptor automático de dos vías. Estos tipos de sistemas funcionan utilizando una configuración de doble brazo en la que la posición abierta de un brazo normalmente se cierra antes que la posición cerrada del otro brazo. Las posiciones de apertura y cierre de los relés de doble brazo normalmente activarán y desactivarán el mecanismo de seguridad del sistema. Debido a esta capacidad de doble brazo, el sistema puede proporcionar un cierre y una apertura automáticos cuando los dos brazos están separados por una distancia de al menos una pulgada y media.
La mayoría de estos relés de enclavamiento electromagnético vienen con una unidad de control de velocidad integrada que les permite controlarlos mediante un reloj analógico o digital. El control de velocidad proporciona al propietario del circuito un medio para programar la velocidad de operación deseada y así evitar sobrecargas de energía eléctrica que podrían causar daños al equipo. Para aquellos sistemas sin controles de velocidad, el operador normalmente necesitará programar las velocidades de apertura y cierre deseadas utilizando una llave manual o un control remoto.
Los dos tipos principales de relés de enclavamiento magnético incluyen los llamados tipos activos y pasivos. Un relé de enclavamiento activo utiliza la bobina primaria para atraer y repeler el campo magnético que lo rodea. La bobina se coloca en un lugar alejado del motor para minimizar las posibilidades de que se vea afectada negativamente por el campo magnético que la rodea. Por otro lado, un relé de enclavamiento magnético pasivo utiliza la bobina secundaria para crear un campo magnético que actúa como un imán. Estos sistemas tienen excelentes capacidades de protección de carga y la capacidad de soportar temperaturas extremas.